El calor aumenta la ventilación en el cuerpo y con ello la circulación sanguínea. Estimula el sistema nervioso, facilita la respiración, disminuye el estrés y los problemas de insomnio. Se estimulan los tejidos retrasando el proceso de envejecimiento.
El vapor origina la dilatación de los poros. Esto significa que las toxinas e impurezas son eliminadas mejorando no sólo nuestro organismo sin también la apariencia de la piel dejándola limpia, luminosa y suave.
Tiene un poder expectorante, Aclara las vías respiratorias siendo ideal para aliviar resfriados, tos, bronquitis y sinusitis
Facilita la secreción del flujo vaginal y calma los dolores menstruales.